Los únicos campesinos que el gobierno acepta como interlocutores válidos son los que están sentados en la Mesa de conversaciones en Tunja. A los demás campesinos, que están adelantando su justa protesta, se les aplica el concepto de Guerra Política. Es comprensible que los negociadores en Tunja manejen una agenda relajada, pues sus peticiones no van más allá de que se les asegure la capacidad competitiva frente a los productores externos de los países con los que se han firmado Tratados de Libre Comercio TLC. Los otros campesinos van más, pues ellos no son dueños de haciendas ni siembran cientos de cargas de papa; su economía es de subsistencia, para ellos la solución se encuentra si se dan profundos cambios estructurales del fallido modelo neoliberal.
Los campesinos tienen la mente clara, porque
son los únicos que respiran aire puro.
El mañoso ministro de hacienda Cárdenas,
hijo de aquel individuo que se
enriqueció a costa del esfuerzo de los cafetaleros y terminó destruyendo
esta pujante actividad agrícola, cree
que los campesinos son mansos y mensos, pensó que con anunciar una simple medida de política económica
consistente en bajar aranceles a la importación de fertilizantes todo estaba
arreglado. La problemática está a kilómetros de ser arreglada con paños de agua
tibia. El área rural del país ocupa
alrededor del 95% y en ella vive casi el 35% de la población colombiana. De los
17 millones de habitantes del campo aproximadamente 7 millones viven en
la indigencia, estos no tienen ni siquiera posibilidad de salir a
protestar. 10 millones de seres humanos viven del
rebusque en el campo, pues no tienen empleo formal. Tres millones de campesinos
no tienen acceso a ningún tipo de servicio de salud. La asistencia técnica
agropecuaria es para los que pueden pagarla, así es que 9 millones siembran y
cosechan acudiendo a sus conocimientos vernáculos. Esto nos da una idea de los
pobres niveles de productividad; y en estas condiciones los genios de Hacienda
y Agricultura de los Gobiernos del “Gran colombiano” y de JJ Santos
suscribieron TLC’s a diestra y
siniestra. Siguiendo con esta aterradora mini descripción de la situación en el
campo colombiano, que ha obligado a los campesinos unos a tomar las armas y
otros a pelear taponando vías, se encuentra que más de 2 millones no tienen
vivienda y 3 millones viven en chozas sin servicio de alcantarillado. En cuanto
al acceso a la educación superior de los campesinos no hay datos consistentes,
pero lo cierto es que el número de profesionales ni siquiera aparece en las
estadísticas oficiales.
¿Será que con una
simple medida económica soluciona el
problema de la estructura de tenencia de la tierra? Cifras oficiales revelan que el 70% de la tierra
fértil está en manos de latifundistas, que no la usan para producir alimentos
sino como alcancía, para guardar su plata mal habida. Y a pesar de esta escandalosa situación casi el ciento por ciento de los
alimentos que llegan a las plazas de mercado en toda la geografía nacional proviene
de las mini parcelas campesinas, las
cuales nunca superan las cinco hectáreas.
Las mismas cifras
oficiales dan cuenta de que el ingreso
promedio del campesino es tan sólo de 220.000 pesos, obviamente en estos
cálculos no se tienen en cuenta a los campesinos indigentes. La pregunta es, ¿y
cómo sobreviven los campesinos que están en la miseria si hay desatención total
del Gobierno? Simple, a la generosidad de los vecinos, que algo consiguen.
En un estudio de
Semana, http://www.semana.com,
se cuenta que los paramilitares se robaron 6.6 millones de hectáreas, es decir,
el 15% de la tierra rural, la cual se está destinando a la siembra de palma
africana y caña de azúcar, para producir biocombustibles. Los nuevos propietarios
de buena parte de estas tierras son las transnacionales, mientras los otrora
propietarios ahora son parias que deambulan
por las ciudades de todo el país. El Gobierno mediante la cuestionada
Ley de Restitución de tierras busca legalizar el despojo otorgándole títulos a
los que realizaron el despojo.
Esta amarga
situación demanda algo más que medidas de política monetaria y fiscal, lo
primero es democratizar el acceso a la tierra, y para esto se tiene que
adelantar una profunda reforma agraria, que acabe de una vez por todas con los
latifundios improductivos, y que entregue la tierra al que la trabaja. Y para el control de los costos de producción agropecuaria no basta bajar aranceles; es necesario
realizar una planificación real de la producción, que responda a la demanda
interna, porque estamos a años luz de pensar en colocar nuestros productos
agrícolas en el mercado externo. Y para
defender la demanda interna es indispensable rescindir todos los tratados de
libre comercio TLC, ya se sabe hasta la saciedad que acuerdos de comercio entre desiguales lleva la peor parte el pequeño. El problema
es que la casta dominante, para mantenerse en el poder, entregó nuestra
soberanía a los gringos, y estos no le permiten realizar acciones que afecten sus intereses. Lo que sí podría hacer el Gobierno es apropiar los recursos
destinados a la guerra para mejorar la situación de los campesinos. ¿Para qué
necesitamos 700.000 hombres en armas si no estamos en guerra contra ningún
país? Cincuenta mil unidades son más que
suficientes; la oligarquía tiene un desmesurado aparato militar únicamente para enfrentar la
guerrilla, que aspira a doblegar en La Habana a cambio de unas curules en el
parlamento. Si realizara las transformaciones que demandan los campesinos, no
habrá un solo hombre en armas.
La oligarquía aspira a convencer con tretas económicas
baratas a los negociadores en Tunja, pero no sabe que los voceros campesinos no
sólo siembran papa sino que, también, cultivan el intelecto. Y no
se necesita ser sabio para darse cuenta que los precios de los combustibles,
los más caros de Latinoamérica, restan competitividad, haciendo imposible
competir con nuestros vecinos.
Los campesinos
tienen en sus manos el futuro social y económico del país; en las carreteras y calles organizados, en La Habana, con la guerrilla avanzando, dialogan para cambiar la situación
socioeconómica por vías pacíficas, y en Tunja negocian con el poder de los
azadones. ¿Cuál de estas formas los llevarán primero al palacio de Nariño a sacar la oligarquía del poder?
En una entrevista al periódico ruso ‘Izvestia’ el presidente de Siria, Bashar Al Assad, explica su visión sobre la situación actual en el país y comenta las declaraciones de los políticos occidentales sobre una posible intervención militar y explica por qué Moscú es su aliado.
¿Cuál es la situación en Siria? ¿Qué territorios quedan bajo control de los insurgentes?
El problema no son los territorios que se encuentran bajo control de los terroristas y los territorios bajo control del ejército. Ningún ejército en ningún país del mundo no puede estar preparado para el combate al cien por cien en todo el territorio de su país. Los terroristas se aprovechan de esto, intentando penetrar en todo lugar donde no está presente el ejército. El problema no es el territorio donde se encuentran los terroristas, que por otro lado cambia cada día y cada hora. El problema son los numerosos insurgentes armados que llegan desde el extranjero.
El principal motivo por el que continúan las acciones militares es la gran cantidad de terroristas que llegan continuamente a Siria desde el extranjero. Además, continúa su financiación desde el extranjero así como el suministro de armamento.
Entrevista ofrecida por el presidente sirio, Bashar Al-Assad al periódico ruso Izvestia. FOTO: Izvestia
Esta entrevista será traducida a muchas lenguas, muchos líderes mundiales la leerán. ¿Qué les quisiera decir?
Quisiera explicar que el terrorismo no es como una carta de naipes en el bolsillo que puedes sacar y utilizar cuando lo deseas y después volverla a guardar. El terrorismo, como el escorpión, muerde en cualquier momento. En consecuencia, no se puede estar a favor del terrorismo en Siria y en contra de él en Mali.
El miércoles el gobierno de Siria hizo frente a la acusación lanzada por los insurgentes de haber utilizado armas químicas. ¿Qué puede responder a esto?
Es un contrasentido: primero se presentan las acusaciones y únicamente después se recogen las pruebas. Es decir, el miércoles nos acusaron y el gobierno norteamericano no anunció hasta al cabo de dos días que empezaba la recogida de pruebas.
Nos acusan de que el ejército empleó armas químicas en una zona que parece que se encuentra bajo control de la insurgencia armada. En realidad en esa zona no hay una línea exacta de frente entre el ejército y la insurgencia armada. ¿Acaso el Estado puede utilizar armas químicas o cualquier otro de tipo de armamento de destrucción masiva en un lugar donde están concentradas sus tropas? Por eso ese tipo de acusaciones son exclusivamente políticas.
Durante las últimas semanas mantuvimos negociaciones con la ONU sobre el trabajo de la comisión y finalmente han llegado los especialistas. Los resultados de su investigación se presentarán en la ONU.
Entrevista ofrecida por el presidente sirio, Bashar Al-Assad al periódico ruso Izvestia. FOTO: Izvestia
¿Admite que Estados Unidos podrá actuar en relación a Siria como lo hizo en Irak, intentando encontrar un pretexto para la invasión?
No es la primera vez que se plantea la cuestión de la intervención militar en Siria. Desde el principio de la crisis EE UU, Francia y Gran Bretaña intentaron realizar una intervención militar pero no pudieron convencer a sus pueblos y a todo el mundo de que esa política fuera sensata y útil. También resultó que la situación aquí es diferente de la de Egipto y Túnez.
Otro obstáculo para la intervención militar es que todos comprenden que lo que tiene lugar en Siria no es una revolución popular ni la exigencia de reformas. Se trata de terrorismo. En una situación así los líderes occidentales no pueden decir a sus ciudadanos: “Vamos a Siria para apoyar al terrorismo”.
Continuando con el tema ruso ¿Qué pasará si Rusia cede a la presión de Occidente?
Con la disolución de la URSS, a EE UU le parecía que Rusia estaba aniquilada para siempre. Pero con la llegada de Vladímir Putin Rusia empezó de forma cada vez más insistente a defender sus posiciones. Como resultado empezó una nueva guerra fría.
Pueden preguntarse por qué Rusia apoya a Siria. Rusia hoy no defiende al presidente Bashar Assad, ya que el pueblo sirio puede elegir a cualquier presidente. Rusia defiende el principio de independencia y de no injerencia en los asuntos internos de otros estados.
Además, Rusia defiende sus intereses en la región y es su derecho. Estos intereses no se limitan únicamente al puerto en Tartus. Los ataques de los terroristas en Siria ponen en peligro la estabilidad en todo el Próximo Oriente. Y la inestabilidad de aquí también se reflejará en Rusia.
¿Se mantienen negociaciones con Rusia sobre el suministro de combustible, mercancías y armamento? En concreto quiero preguntarle por el contrato para suministrar sistemas S-300, ¿les han llegado?
Evidentemente, ningún país no puede anunciar qué tipo de armamento tiene ni tampoco decir qué contratos se han firmado sobre su suministro, esto es parte de los secretos del Estado y de las Fuerzas Armadas.
Pero quiero decir que todos los contratos firmados con Rusia se están cumpliendo. Y ni la crisis, ni la presión de Estados Unidos, Europa y los países del Golfo no han impedido su cumplimiento. Rusia suministra a Siria lo que ésta necesita para su defensa y para la defensa de su población.
Entrevista ofrecida por el presidente sirio, Bashar Al-Assad al periódico ruso Izvestia. FOTO: Izvestia
¿Qué tipo de ayuda espera Siria de Rusia: económica o armamento?
El apoyo político de Rusia y también el exacto cumplimiento de los contratos militares, a pesar de la presión norteamericana, han hecho mejorar de forma apreciable nuestra situación económica.
¿Quiénes son sus principales aliados y quiénes sus adversarios?
Los países que están detrás nuestro en la arena internacional son Rusia y China y a nivel regional Irán. Sin embargo, puedo decir que en el mundo se observa un cambio positivo, algunos países han empezado a cambiar sus actitudes.
Hay unos países que apoyaron abiertamente a los terroristas en Siria, Catar y Turquía. Catar es el patrocinador de los terroristas y Turquía les entrena y les garantiza corredores. Ahora Arabia Saudí ha sustituido a Catar en calidad de patrocinador.
Si algo ha dejado en claro el “inexistente” Paro Agrario
Nacional es que el modelo económico capitalista en su máxima expresión, el neoliberalismo, ha colapsado, y no sólo en Colombia sino a
nivel global. No hay cómo solucionar los problemas de las mayorías tanto del campo como de la ciudad.
Se ha evidenciado que se necesita una urgente transformación social
y económica, y se tendrá que hacer por las buenas o por las malas. Y, también, se ha hecho evidente que la solución a la problemática
campesina y minera pasa por una democratización de la tenencia del suelo y subsuelo,
concentrados en un puñado de latifundios improductivos y/o en manos de empresas
transnacionales unas dedicadas a extraer sin mayores contraprestaciones nuestros recursos minerales y otras a sembrar vegetales destinados a la generación de
biocombustibles, nada que ver con la seguridad alimentaria de la población en
general. Los campesinos dedicados a
sembrar papa y criar vacas de leche son víctimas de los desaciertos gubernamentales, a quienes no les ha importado ceder la soberanía nacional a cambio de poder mantenerse en el poder.
La presión de las Corporaciones
Transnacionales también impusieron otro tratado con un gigante como es la Unión Europea; y los vecinos del Sur no han
desaprovechado la ola globalizadora de
nuestra oligarquía y ha logrado firmar sendos TLC, sabiendo que nosotros no tenemos
como competirles. La ponderada
globalización terminó con las fuentes de
ingreso de los productores del agro; definitivamente no se puede competir con ninguno de los países con los que
se acordó comerciar sin aranceles; los Norteamericanos y europeos subsidian
hasta el 70% los costos de sus productores agropecuarios; y un país como
Ecuador, que no ha hipotecado su soberanía, produce sus propios fertilizantes e
insumos de tal manera que un bulto de fertilizante allá cuesta en pesos
colombianos $25000 y el mismo en Colombia $75000. Mientras tengamos que comprarle los insumos a las trasnacionales no podremos ser competitivos. Además, Colombia no puede otorgar subsidios
a los productores, pues los acuerdos firmados así lo contemplan.
El nivel de conciencia y poder de la clase
campesina en el mundo entero siempre se
ha minimizado, pero ellos fueron los que llevaron a cabo las
Revoluciones Rusa, China, vietnamita e
incluso la cubana. En Colombia el pueblo
en armas es casi completamente de origen campesino, precisamente gracias a un campesino, Manuel Marulanda Vélez, hoy la
oligarquía se ha visto obligada a conversar de Paz en igualdad de condiciones con los
rebeldes en La Habana. Y los campesinos apostados en todas las vías
nacionales pusieron a temblar a la oligarquía sin saber como convencerlos para
que regresasen a sus parcelas.
La problemática del país que se discute en la
Mesa con los campesinos es tan o más compleja que la
tratada en La Habana entre los alzados en armas y el Gobierno. Además, en Cuba hay un diálogo de sordos, a las
cientos de propuestas de la insurgencia el gobierno dice NO; el meollo para la oligarquía está en
convencerlos de reintegrarse a la vida nacional sin que las
estructuras sociales y económicas cambien, claro que, se supone, así lo aceptaron los
rebeldes. Da la impresión que en La Habana está prohibido tocar la estructura de tenencia de la tierra, la suerte de
la minería tradicional, la estructura de costos del transporte, aspectos
relacionados con la soberanía nacional, el modelo económico y las
superestructuras políticas y jurídicas. Nada... nada... se cambiará. Se espera, ilusoriamente, que los alzados en armas den por terminado su alzamiento, y vayan los jefes a la cárcel y algunos de la base al Congreso. En la Mesa de los campesinos las soluciones, necesariamente, tienen que entrar a revisar estructuralmente el modelo y las políticas económicas y el marco jurídico, de no ser así no habrá soluciones. Qué encrucijada para la oligarquía, si no arregla en una Mesa le toca hacerlo en la otra. Lo más grave de todo es que no está en sus manos negociar cambios estructurales en ninguna de las Mesas. ¿Habrá paz en Colombia? Lo cierto es que en el horizonte cercano se vislumbra un acercamiento entre todos los campesinos.
Las últimas declaraciones de los voceros de
los insurgentes dejan ver que no habrá firma de acuerdos si no se contemplan
cambios estructurales en el modelo. Las FARC-EP y el ELN han
hecho causa común, y ya estos últimos, a pesar de lo que algún día dijera el
comandante Antonio García: “aceptar
negociar sin que nada cambie es una irresponsabilidad”, están sentados
en otra Mesa en Uruguay, donde
funge como presidente Pepe Mujica, un ex de la causa revolucionaria, discutiendo lo ya discutido con las FARC en
La Habana. ¿Quien desenreda este ovillo?
El viernes 23 de agosto de 2013 los productores de leche,
los paperos, mineros y transportadores de la provincia del Valle de Ubaté,
establecieron un punto de inflexión en las luchas populares por los cambios con
justicia social del modelo capitalista de corte neoliberal, y que tiene sumida
en la miseria a millones de colombianos. Las últimas medidas económicas del
gobierno de turno, en cabeza de J. J Santos, acabaron con las fuentes de
subsistencia de los habitantes de
una de las regiones más prósperas de Colombia, la Provincia de Ubaté; por cierto, abundante en riquezas minerales, principalmente carbón, el cual desde
principios del siglo pasado ha venido siendo explotado de manera tradicional,
ocupando el 90% de la mano de obra no calificada y moviendo el 70% de la
economía. Las tierras de los valles y partes altas están entre las más feraces y costosas del país. La ganadería está altamente tecnificada;
el mejoramiento genético ha hecho que se
obtengan niveles de producción de leche similares a los obtenidos en países
desarrollados, razón por la cual se le considera la capital lechera de
Colombia.
Del
campo a la ciudad. Campesino en camino hacia el Paro Agrario. 2013
El modelo neoliberal
implementado desde el gobierno de César Gaviria, el cual contó,
precisamente, como ministro de economía
con un hijo de la Provincia el señor Rudolf Hommes, quien se jactaba de que ”… en adelante no habrán riquitos sino
verdaderos ricos”, su predicción se cumplió parcialmente, pues un puñado de individuos, caso David
Murcia, otro hijo de Ubaté, y algunos
importadores de leche, papa, cebada y trigo, llenaron sus bolsillos,
pero el resto de sus paisanos han ido río abajo y ya casi tocan fondo, el fondo
de la laguna de la pobreza. Luego vino el
gobierno del “Gran Colombiano”, quien luchó a muerte por firmar el TLC
con los EE UU, hazaña lograda por su
sucesor J. J Santos, asesorado por J.J Rendón. Con este tratado los productores
no tienen a quien venderle la leche ni la papa.
Esto simplemente significa que no
saben qué hacer para subsistir. Por su parte los mineros se quedaron sin
licencias, porque el gobierno sostiene que los pequeños y medianos mineros no
tienen la capacidad para explotar el carbón con la eficiencia y seguridad con que lo harían las
transnacionales mineras. Cosa que a los mineros tradicionales poco les importa,
pues ellos no quieren extraer el carbón en un año, como lo harían las megamineras, sino que quieren conservarlo
para beneficio de las futuras generaciones.
Sin alternativas de
supervivencia los productores agropecuarios y los mineros, apoyados por los
transportadores, salieron a las vías a mandarle un mensaje al gobierno: “cambian el rumbo o los tumbamos…”, pero,
de manera arrogante, la oligarquía por boca de J. J Santos ha contestado: “El tal
Paro Agrario no existe”, y “no
entramos a discutir hasta que no levanten la protesta”. El arrogante desconocimiento de la realidad
ha sido el detonante para los hechos de fuerza. Para demostrarle al despistado
presidente, un grupo de labriegos se vio
impelido a colocar palos y llantas en la mitad de la vía, evitando la entrada y
salida de vehículos al casco urbano de Ubaté.
A los pocos instantes apareció un
grupo del ESMAD, unas cien unidades, arremetiendo violentamente contra los
manifestantes con armas de largo alcance y con escopetas lanza gases; pero la salvaje y
desmesurada arremetida, en vez de ahuyentar a los manifestantes les enervó y,
estando de por medio su integridad, se
vieron obligados a contraatacar a los
agresores. Cientos de labriegos apoyados por los estudiantes de
la Universidad de Cundinamarca y del colegio Instituto Bolívar les gritaban: “este año, refiriéndose a la reciente
Feria, el alcalde no nos trajo corraleja,
pero nos trajo al ESMAD; y no porque en
la noche usemos ruana vayan a creer que
somos ovejas”. Luego la acción fue in
crescendo; se lavaron la cara con leche tibia y empaparon los pañuelos con la misma; así los gases quedan
atrapados en los pañuelos sin causar mayor afectación en los ojos y en las vías
respiratorias, descubriendo de paso, a
decir del comandante de la policía, una “arma no convencional” para atacar a la
fuerza pública. Grupos entre 6 y 10 hombres y mujeres, organizados
algo así como las falanges del ejército griego, levantaron troncos de unos 6 metros de largo y
de un peso de doscientos Kg, y se fueron
de frente contra los hombres del ESMAD derribando a los que se encontraban a su
paso. Los héroes, no hablo de los campesinos, sino los del ESMAD totalmente sorprendidos corrieron junto con el
resto de policías hacia los potreros aledaños, armando un pandemónium entre vacunos
y asnales; entonces, vacas y “fuerzas del
desorden” corrían para todas partes a cual más con el rabo entre las piernas.
Valles
fértiles de Ubaté. Ahora tierras
inútiles por las políticas neoliberales. 2013.
Luego de la
descomunal humillación a mano de los inocentes campesinos los policías se
desplazaron a las afueras, y allí se desquitaron con las personas que, desprevenidamente, departían en los
corredores de sus viviendas. Y en un hecho criminal, que está documentado en un
video tomado con un celular, un grupo de motorizados (héroes) se dedicaron a romper
los vidrios de la casa de una anciana de ochenta años que vive sola.
Al siguiente día, por
iniciativa del Gobernador de Cundinamarca, los alcaldes de los diez municipios,
que conforman la Provincia, convencieron a los representantes de los paperos,
lecheros, mineros y transportadores locales,
para que se reunieran con ellos y un enviado de la Gobernación. Allí
trataron de dividirlos y convencerlos de que ellos servirían de garantes ante
el alto gobierno, para que atendiera sus peticiones con la condición de que
levantaran el paro. Pero los productores pronto se dieron cuenta de la engañosa
propuesta, y luego de 6 horas quedaron en
que seguirían adelante con su propuesta. Los productores agropecuarios tienen
claro que ni siquiera Gobierno Nacional está en capacidad de solucionar su
problemática mucho menos un gobernador mañoso y unos desvalidos alcaldes.
Industriales de la
leche, comerciantes y constructores de la provincia también han expresado su
apoyo, cerrando establecimientos, a los productores en paro. Y han hecho
pública su repulsa a la actitud displicente del Presidente, lo mismo que su
rechazo a los congresistas, quienes no se han pronunciado al respecto, y a
quienes también se les culpa como responsables de la hecatombe del agro y
sector minero, pues son quienes han aprobado los TLC y las leyes lesivas contra
los mineros y el pueblo en general. Les advierten que nunca más quieren verlos
en la Región, porque serán recibidos como lo hicieron con los del ESMAD.
Ubaté. La naturaleza también está triste. 2013
Entre claro oscuro el porvenir de la Provincia de Ubaté. 2013
Lo que tiene
realmente preocupados a los productores lecheros, paperos y mineros, es que sus problemas demandan cambios
estructurales, muchos de los cuales se
salen de las manos del gobierno Nacional, pues obedecen a políticas ordenadas
por las transnacionales, el FMI, el BM y
otras por el departamento de Seguridad
de EE UU, quién mantiene en el poder a la casta oligárquica. Por ejemplo, el ministro de agricultura
dice que los precios de los fertilizantes no se pueden modificar porque eso es
resorte de una transnacional; en Ecuador, que no ha hipotecado su soberanía, en
promedio un bulto de fertilizante cuesta $ 25.000 y en Colombia el mismo vale $
75.000, ¿podrá competir un papero colombiano con uno ecuatoriano? En cuanto a
la leche, la Unión Europea y EE UU, con quienes suscribimos sendos TLC,
subsidian a sus productores hasta con el
70% de los costos de producción, en Colombia
no se subsidia un solo peso,
entre otras cosas, porque los europeos y los gringos no lo permiten so pena de
no comprarnos las flores y otras baratijas que les enviamos. Y los TLC no
pueden ser siquiera revisados, pues el amo les retira su apoyo, y al otro día
la oligarquía pierde el poder. En cuanto a la minería es peor el panorama, pues
ya están concesionadas las reservas de carbón a las compañías mineras
canadienses y europeas.
Sólo nos queda apelar
al estoicismo de nuestros compatriotas dedicados a los sectores primarios de la
producción. ¿Pero será que el vientre vacío de los campesinos y mineros seguirá
las recomendaciones de los antiguos
anacoretas, y aceptarán
alimentarse con pan de aserrín y miel de avispas? ¿O, como los comuneros, levantarán azadones y palas y avanzarán hasta
el palacio para derrocar “los malos gobiernos” y el fallido modelo económico?
Utilizando las malas costumbres de boliche a las que él mismo se refiere, Mujica se hace la víctima y pasa de ser el verdugo de la educación pública y sus trabajadores, así como de la Salud Pública y sus trabajadores, a inocente víctima acorralada por el "malón" de los trabajadores. Este discurso no va dirigido a los trabajadores sino a los sectores medios con un poco más de ingresos y a los más pobres, para enfrentar a ambos con el movimiento sindical, aislar las luchas en curso e imponerles finalmente LOS PLANES DEL FMI sobre la paulatina liquidación de la educación y la salud pública abriendo paso así a un alud privatizador tal cual lo exige el FMI.
La actual confrontación que valerosamente llevan adelante los maestros, profesores, funcionarios de la Salud y demás funcionarios del Estado, es una batalla contra los planes de genocidio social que implementa el FMI en todo el mundo y que en nuestro país se llevan adelante a través del gobierno Mujica. El Presidente pretende presentar a un gobierno, que está sentado en la cima de un aparato de estado opresor y con todos los medios a su disposición, como un inofensivo abuelito patoteado por los trabajadores aplicando así los versos de la "viveza" bolichesca. La "víctima" dice estar "acorralada" para a renglón seguido sostener que es un "esfuerzo inútil" y que no concederá lo más mínimo de los reclamos de los trabajadores. Es decir que tiene el poder de hacerlo, lo cual confirma lo antes dicho: Mujica tiene todos los hilos en sus manos y si condena a sus propios votantes que lo llevaron hasta el sillón, es para seguir aplicando la línea hambreadora del FMI.
Sostiene que lo hace para ayudar a los más pobres y necesitados y con eso le dice a este sector que los trabajadores en conflicto le quieren "robar" sus pesos, que el pobre "víctima" Mujica tiene destinado para ayudarlos, socavando así artera y suciamente la unidad del pueblo, tal cual alguna vez proclamó el Frente Amplio como objetivo. Hoy con Mujica se terminó la unidad del pueblo, ahora se trata de sector contra sector de ese pueblo que de conjunto sufre las consecuencias de la aplicación de los planes neoliberales del gobierno. Desgaste, intriga y tratar de generar aislamiento social a los que reclaman. Esa es la práctica implementanda desde el Gobierno.
Mujica, una vez más usando el "chamuyo" callejero pretende dar vuelta la tortilla a resultas de la cual quienes reclaman un salario digno que les permita vivir NO SON SOLIDARIOS, él si que lo es, afirma, a través de negarle a los trabajadores esos derechos a nombre de una ayuda a otros que están peor. No debería haber nadie que no tuviera un salario digno y tampoco nadie que estuviera peor. Sobre esas bases se fundó la CNT hoy PIT-CNT, el Congreso del Pueblo y esas banderas fueron recogidas por el Frente Amplio. Mujica ha pasado del triunfalismo de que estamos bárbaro a un empezar a asustar a los que reclaman con la coyuntura que cuando se la indicó se burló de ello ya que él con su "astucia" y sus supuestas "alianzas" (con todos y al final con nadie más que con el FMI y el imperio) venía garantizando lo que se le llamó el "blindaje".
"Blindaje" que parece haberse evaporado y ahora se está empezando a hablar de coyunturas negativas y apretarse el cinturón. Para implementar esto Mujica acorrala a los huelguistas, a los sindicatos y a todos los que reclaman y hasta se burla de los ecologistas y denigra a quienes se oponen a la gran minería a cielo abierto.
Ahora bien, Mujica es el "jefe" ("a mí me voto la gente"), pero la aplicación de esta línea antisindical está respaldada por el conjunto de las cúpulas del Frente Amplio. Mujica dice haber aprendido mucho con Erro, pero es evidente que se le han olvidado las denuncias públicas de Erro contra la explotación y hasta su renuncia como Ministro por la aplicación de los planes del FMI. Nadie de entre los legisladores del Frente Amplio ha tenido el coraje cívico de oponerse a esta política antisindical, ni uno solo ha hecho al menos un discurso en el parlamento. Todos están disciplinados con la línea cupular y gubernamental de aplicar los dictados del FMI. Ni una propuesta ni una idea. Se han quedado sin asunto y actúan por inercia, apuntando a la renovación de los sillones. Ni programa ni tradiciones y ni siquiera las resoluciones del Congreso que proclamó la candidatura de Mujica. No se entiende cual es la razón de que deban de ser tantos para no producir nada. Esta experiencia que está viviendo la izquierda es paralizante empezando por las cúpulas y todas las intermedias hacia abajo y la única acción concreta que se ve es el levantar las manos para el voto "por disciplina" de partido, no por la disciplina que surje de los principios, del programa, ni de los intereses de los votantes y del pueblo trabajador.
Mujica dice que están acorralados, quizás así sea, pero estan acorralados por ellos mismos, por sus contradicciones, su inconsecuencia, sus intrigas cupulares por los sillones. Contra los trabajadores un amenazante Mujica dice que el gobierno tiene que defenderse en el mismo estilo de los Bush, los Rajoy y cuanto opresor anda por el mundo. Para eso claro, tiene todo el aparato del estado, del partido FA bien aceitado con cargos y puestos, y si hiciera falta con la represión que siempre está presente, sobrevuelva, apalea, fotografía y ficha, ataca con munición letal, promete sanciones, descuentos y hasta despidos. Qué podredumbre!.
La Habana, Cuba, sede de los diálogos de paz, agosto 26 de 2013
Un acuerdo de paz no es asunto que se pueda resolver o definir de manera unilateral, así como el mecanismo de refrendación no es aspecto que pueda ser resuelto solamente por el gobierno. Tomarse esas atribuciones es flagrante violación del acuerdo general firmado en La Habana. La circunstancia de presentar ante el Congreso un proyecto de ley que prepara el terreno para imponer un mecanismo nodal para el proceso, sin discutirlo con la contraparte, expresa una situación de hecho que ni se comparte ni se acompaña.
¿Se imagina el país y el mundo a un Presidente con poderes omnímodos derivados de un referendo que con la excusa de los tiempos suplanta la mesa que con tanto esfuerzo se ha establecido para buscar la paz? ¿Se lo imaginan con un marco jurídico unilateral que lo convierte en juez y parte, siendo el Estado victimario y generador de la confrontación? ¿Y que tal una Corte Penal Internacional injerencista y sesgada que muy poco o nada sabe del conflicto interno colombiano? Y como si fuera poco, los Estados Unidos pidiendo guerrilleros en extradición como venganza por la histórica defensa que hemos hecho de la soberanía.
Concomitantemente el gobierno insiste en que el marco jurídico para la paz es un imperativo sine qua non. Quede claro de una vez por todas que no habrá sometimiento de las FARC-EP a ningún marco jurídico con diseños unilaterales.
El gobierno ha sido reacio a la integración de la Gran Comisión de la responsabilidad histórica de la cual se desprenderían responsabilidades insoslayables para quienes han sido parte del conflicto más allá de los alzados en armas.
El espectáculo de un mandatario y de un poder constituido excusado o perdonado por un referendo, no se va a dar con nuestro consentimiento. Porque eso es lo que implica la aceptación de tal fórmula que por efecto de la desinformación y la manipulación a través de un procedimiento aparentemente democrático, a unos que por votación se les consideraría los “buenos”, se les autoriza a ser condescendientes y generosos con los que, así las cosas planteadas, serían los “malos”. Aceptar estas reglas del juego implicaría traicionar nuestra lucha, a nuestros comandantes fundadores que se vieron forzados a recurrir a las armas para no dejarse aniquilar por unas castas y partidos dominantes, y para proteger intereses de masas enteras. La verdad histórica no la vamos a cambiar por un capricho de coyuntura de una de las partes del conflicto atada a un interés electoral revestido de afanes.
El regalo de las curules no lo queremos, si es con el precio de que, mientras algunos de los nuestros van al Congreso, a otros se les destine a ocupar sitios tras las rejas o condenados a la extradición. ¿Qué otros ocultos caprichos entrañará la maniobra?
En la mesa debe prevalecer el principio de igualdad en momentos en que la suerte del bien supremo de la paz está de por medio.Ceder atribuciones, ya a una sola persona, ya a mecanismos inciertos, es colocarnos en condición de inferioridad respecto de la contraparte en el conflicto que ya aceptó responsabilidades derivadas de él.
Se está pretendiendo un ente sin funciones constituyentes, que no podría conocer de la reforma a la justicia, ni de la consagración en la Constitución de la independencia orgánica de la jurisdicción, ni del reordenamiento territorial, ni de la creación de un órgano electoral independiente. Tampoco se desprende de sus funciones la seguridad jurídica que requiere el futuro de la paz. ¿Qué procedimiento, qué mecanismos de control, le deparan al país en la perspectiva de esta aventura improvisada?
Recurrir al referendo para el propósito de refrendación no es técnicamente aconsejable ya que lo que se vota es un “temario o articulado”. Así lo indica la Constitución en su artículo 378. Si el “temario o articulado” es extenso, no se leerá. Si se lee, no se entenderá y se dejará de lado. Y si se reduce su redacción, no podrá establecer el contenido de esa sucinta redacción, los alcances que se requieren para lograr las transformaciones necesarias que fundamenten la paz.
Las FARC-EP no piensan modificar el Acuerdo General para la Terminación del Conflicto de donde se desprenden claramente sus facultades de negociación, para ser transferidas a un cuerpo de menor valía. Recordamos que la naturaleza del acuerdo especial suscrito por las partes que dialogan hoy en La Habana corresponde en categoría a aquellos señalados por el artículo 3º común a los cuatro Tratados de Ginebra de 1949 y sus dos protocolos adicionales. De esto dimos noticia al CICR como lo aconsejan diversos textos y autores.
¿Por qué el gobierno le tiene miedo a la Constituyente en los términos planteados en el artículo 376 de la Constitución? Nosotros no le tenemos miedo. Es el mejor camino porque en dicho escenario sí se logra todo lo que puede garantizarle larga duración a la paz nacional, como la reforma política, económica, la reforma al aparato electoral, etc. ¿Por qué no se le dice al país claramente cuál es la paz con que sueña el gobierno? ¿Cuál es el argumento para frenar los cambios institucionales que pueden ser garantía de paz?
Obviamente la ley convocatoria de la Constituyente habrá de incluir para conocimiento suyo los temas que se acuerden en la mesa de La Habana. Y podría acordarse por las partes llevar aquellos sobre los que no hay acuerdo, o sea los de disenso, para que, como fruto de los debates, se aprueben o desaprueben.
La manera como se convocaría la Constituyente debe dejarse para el punto 6 “Implementación, verificación y refrendación”. Lo mismo la forma como se habrá de lograr la seguridad jurídica de lo acordado. Poner la suerte de una de las partes del conflicto en manos de un poder constituido que ha aceptado responsabilidad por acción y por omisión, no es una fórmula que procure garantía, particularmente cuando esa misma parte o poder constituido es autor de un amañado marco jurídico para la paz que tiene entre ojos a las FARC-EP como destinatarias. Estamos en un momento cuyas realidades van acompañadas de variables políticas y jurídicas, claro está; pero más políticas por el momento en que se vive, y por la coyuntura electoral en que se hace la propuesta, lo cual la descalifica. No nos pueden pedir que renunciemos a facultades que se desprenden del acuerdo firmado en agosto del año pasado. La paz no debe tener forma de embudo. La paz que requiere Colombia debe incluir la justicia social.
¿Por qué aplazar lo fundamental? ¿Un proceso de paz no es acaso el momento para modificar instituciones? ¿Pueden darnos un argumento creíble, aparte de la manifestación de que ahora no pero más adelante sí? ¿De cuántas promesas y proyectos aplazados están llenos los capítulos de la historia nacional? ¿Cuánto hace que el país espera el reordenamiento territorial? ¿Si la mera mención de las Zonas de Reserva Campesina ya existentes y garantizadas legalmente producen temor entre la plutocracia colombiana, qué ha de esperarse del futuro del reordenamiento territorial? ¿No está acaso un país entero volcado en las calles exigiendo transformaciones inmediatas, como consecuencia de una política neoliberal fallida de la que han derivado ruinosos Tratados de Libre Comercio firmados a espaldas del país? El pueblo está perdiendo la paciencia.
En conclusión: La iniciativa presentada ante el Congreso por el gobierno como primer paso para refrendar en el futuro el eventual acuerdo que se llegare a alcanzar en La Habana, no es vinculante. No la acompañamos, ni sujetamos los diálogos y sus resultados a dicha decisión unilateral. Sin embargo y a pesar de las circunstancias, las FARC-EP se mantendrán en la mesa, fieles al compromiso de buscar la paz para Colombia por todos medios.
El Presidente Santos no pierde oportunidad para manipular. Al fin y al cabo se trata de un hombre de negocios surgido del mundo de los grandes medios, acostumbrado a tergiversar y menospreciar los puntos de vista contrarios. No tuvo escrúpulos para afirmar ante la cúpula militar, que el comandante de las FARC-EP había escrito quejándose porque lo consideraran objetivo de alto valor. Allá él. De este lado nunca recurrimos a la distorsión de lo dicho por el Presidente, preferimos interpretarlo en su exacto significado.
Quien haya leído el escrito de Timoleón Jiménez sabe bien que lo que éste criticó fue la pública orden presidencial de ejecutar a cualquier miembro de las FARC que se encuentre en territorio colombiano. El Presidente no puede emitir órdenes de matar compatriotas apenas los vean, porque la pena de muerte está proscrita en el país. Además tal orden resulta demasiado peligrosa cuando el mismo Presidente, sus ministros y generales viven acusando diariamente a los dirigentes populares y de oposición de ser miembros de las FARC.
El Presidente ha autorizado públicamente la ejecución de una innumerable cantidad de colombianos inconformes con sus políticas, lo cual coincide con su conminación al alto mando a ser contundentes con quienes promuevan desórdenes en las vías públicas. Es que así, aunque cueste a algunos admitirlo, con ese aire de aparente cordura y apego a la legalidad, las clases dominantes en Colombia llevan decenios ordenando asesinatos, desplazamientos, desaparecimientos, torturas, amenazas y parálisis política a causa del miedo.
El propio Santos reconocía que con su designación por Gaviria como ministro de comercio exterior, le fue ordenado abrir la economía. Desde entonces su empeño ha sido materializar en nuestro país el designio globalizador neoliberal: libre comercio total, apertura plena a la inversión extranjera, privatización de las entidades públicas, entrega de nuestras riquezas naturales al gran capital transnacional, desmejoramiento de las condiciones laborales de los trabajadores y endeudamiento creciente con la banca internacional.
Así que la oligarquía colombiana no niega, sino que se ufana de haber asumido como propia la estrategia de dominación planetaria del gran capital, que, como todo el mundo ve, conduce a inmensas poblaciones a la más angustiosa crisis social, al desastre ambiental, a la guerra total de aplastamiento de los pueblos, a la hecatombe nuclear y hasta a una avizorada extinción de la especie humana. A ese proyecto vinculan todos sus mecanismos de dominación, desde la educación pública hasta la gran prensa, pasando por sus aparatos armados y de ley.
La Prosperidad para Todos no es otra cosa que la versión colombiana de las imposiciones del Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, la OMC, y todos los grupos de poder que los inspiran como el famoso Bilderberg o la Comisión Trilateral. Las locomotoras minera, agroindustrial, de infraestructura, vivienda y ciencia, lejos de procurar el bienestar de los colombianos, están concebidas para garantizar la penetración, el apoderamiento y control pleno del país por los poderes internacionales del capital financiero mundial.
Con los cuales se encuentran entrelazados los más importantes grupos económicos nacionales. Son ellos los que crecen y aumentan su riqueza a la sombra de los inversionistas extranjeros. Mientras Santos, como un generoso Rey Midas que transforma en oro todo cuanto toca, habla de que sus políticas han sacado a millones de colombianos de la miseria y la pobreza, además de llevarles alimentos, educación, salud, vivienda, empleo formal y jugosas oportunidades de prosperidad, la gente de carne y hueso se toma las carreteras y las plazas en reclamo de atención y justicia.
El recurso presidencial consiste en señalar que no hay reales razones para que la gente proteste. Su gobierno está haciendo todo cuanto puede hacerse por ella. Y no descarta que las protestas sean en realidad artimañas usadas por gentes interesadas en sembrar el caos, como ocurre con las guerrillas o algunos personajes de la oposición. Pese a ello, afirma que respeta el derecho a la protesta y al disentimiento. Claro, siempre que semeje un lloro ante el muro de las lamentaciones,un llanto incapaz de presionar cualquier cambio en sus políticas.
Ahora más que nunca está claro que han sido los designios del gran capital para Colombia, los que han exigido poner fin de modo definitivo al conflicto. Para la ejecución de sus planes en el país y el resto del continente resulta imperativo remover del camino esa mula muerta de la que habla Santos. Este ha asumido juicioso su tarea, terminar con el conflicto por las buenas o las malas. Allí entra a jugar su papel la vía del diálogo y las conversaciones. Como a la gente, a la guerrilla también habrá que darle la oportunidad de llorar sus penas.
Por eso la Mesa. Para que reclamen en voz baja y mansamente cuanto quieran. Aunque no se les acepte ni conceda nada de lo que planteen. La comunidad internacional, es decir los Estados Unidos y la Europa Occidental, están dispuestos a aceptar que la guerrilla desmovilizada sea beneficiaria de una justicia transicional, que la deje finalmente en una libertad precaria, pero anulada en materia política. En eso consistiría el Acuerdo, un perdón relativo a cambio del espaldarazo guerrillero a la globalización neoliberal para Colombia.
El primer punto de la Agenda, sobre política agraria integral, aparece como firmado con algunas salvedades que se definirán más adelante. Esas salvedades son todas las objeciones que las FARC han puesto a los planes del gran capital para convertir el territorio colombiano en su gran dispensador de recursos mineros, biológicos, agroindustriales y alimentarios, a costa de la propiedad y la tranquilidad de los pequeños y medianos productores agrícolas, pecuarios y mineros, así como de las comunidades negras e indígenas.
Tampoco piensa Santos ceder un milímetro en materia de democratización de la vida nacional, el segundo punto de la Agenda. Cuando discursea que no está negociando el Estado, ni el modelo económico, ni el sistema político, ni el sector privado, lo hace para tranquilizar al gran capital expectante por cualquier debilidad en la Mesa. Tranquilos, que aquí no va a cambiar nada. Sólo se trata de darles la última oportunidad a los bandidos para que se desarmen y compongan su vida futura al calor de nuestras sagradas instituciones.
Si no lo hacen, como dijo recientemente, ellas serán las primeras damnificadas, también políticamente, como ocurrió en los procesos anteriores. Aunque el Presidente cree jugar con cartas marcadas y seguro de ganar, está nervioso. Promete y miente, amenaza y miente. Mientras tanto, un país del cual no gusta, que no se parece al Londres que sueña, sale a las calles a exigir cambios, a enfrentar la autoridad, a reclamar por políticas distintas. Las mismas por las que las FARC llevamos meses discutiendo en la Mesa de La Habana. Lo que Santos no quería.
Timoleón Jiménez
Comandante del Estado Mayor Central de las FARC-EP
Todos debemos apoyar esta protesta social de carácter transformadora. La lucha es por el cambio estructural de este agotado modelo socio-económico.
Algo inédito: El Valle de Ubaté en rebelión
Los paperos, productores de leche y medianos y pequeños mineros del Valle de Ubaté: Sutatausa, Tausa, Carupa, Lenguazaque, Cucunubá, Fúquene, Susa, Simijaca y Guachetá, tradicionalmente afectos a los gobiernos de turno, se han sumado beligerantemente a la protesta campesina. Eso es un síntoma de los cambios socio-económicos que se avecinan en Colombia. Personas culturalmente pacíficas, ajenas a la protesta social, se puede decir conformistas y profundamente conservadoras, en el sentido literal de la palabra, dada la desesperación por haber perdido sus fuentes de sustento se han visto obligadas a enfrentar a unas fuerzas del orden, preparadas para maltratar a humildes personas frustradas e indignadas. Si los esbirros del ESMAD dejaran hacer tranquilos su protesta a los campesinos, estos en vez de tirarles piedras y palos, lo más seguro es que les alcanzasen papas y leche. Durante un descanso un campesino reconviene a un policía - Hermano, si ustedes no nos pican, no rebotan el avispero; sus gases no nos asustan. Y en seguida le dice -hagamos una tregua, descansemos un rato y luego volvemos. Así es esta gente frentera y valiente. Otrora dedicados a la siembra de trigo, cebada y maíz, pero por imposición del FMI y del Banco Mundial al gobierno de turno, por aquello de las ventajas comparativas, terminaron convertidos en lecheros y paperos, y, ahora, por otra medida económica desacertada, no saben que hacer. Tildarlos de guerrilleros o infiltrados por la subversión da risa, pues estos "humildes labriegos" son propietarios, el que menos de cinco hectáreas, de tierras que superan los cien millones de pesos por unidad. Allí tienen propiedades los familiares de Jaime Garzón, del genio de DMG David Murcia, los Ex ministros Rudolh Hommes, Juan Camilo Restrepo y varios senadores, claro que todos estos salen a tirar piedras, pero a sus revoltosos vecinos. Los hijos del Gran Colombiano son dueños de canteras en Carupa, desde allí, con anuencia de la CAR, realizan miles de viajes de recebo, deteriorando las vías a cambio de nada. Por eso Uribe le dice a los productores campesinos: "Sigan en la protesta social, eso sí calmaditos...", no sea que le dañen las volquetas a sus hijitos.
La economía de la provincia depende en un 70% de la extracción de carbón, un 20% de la papa y 10% de la leche. El gobierno no volvió a otorgar licencias de explotación minera, y las que se van venciendo no vuelven a renovarse. Con el objeto de entregarlas a las empresas mineras transnacionales. Los obreros de las minas ahora deambulan por las calles intentando el rebusque, muy pocos son absorbidos por la construcción, la que, obviamente, ha perdido dinamismo. En esta panorámica se desarrolla el Paro Agrario en la capital lechera de Colombia. El ministro de Comercio acaba de informar que los problemas de los paperos y lecheros no son a causa de los TLC, entonces quién es el responsable, ¿Santos es un inepto? ¿definitivamente, el modelo no funciona y habrá que cambiarlo? ¿El contrabando? ¿La policía por permitirlo? El funcionario no indica cuál es la razón del malestar social, dando a entender que la gente sale a las vías a hacerse golpear por gusto o por incitación de las guerrillas.
Primero los cafeteros dieron ejemplo de resistencia y ahora son los paperos y lecheros. En Ubaté se está escribiendo un nuevo capítulo de las luchas populares; si bien sus peticiones son claramente de carácter reivindicativo, por inercia se trasladan al campo político, indicando que las políticas gubernamentales están equivocadas y que el modelo neoliberal tiene que ser desmontado lo antes posible, so pena de tener que enfrentar una rebelión generalizada. Otra cosa que aprendieron los productores de papa y leche del Valle de Ubaté y los mineros de Sutatausa, Cucunubá, Guachetá y Lenguazaque es que las soluciones están en sus propias manos, y que sólo se logran mediante la fuerza. Hasta ahora su metodología para enfrentar a las tenebrosas fuerzas "del orden" han sido altamente efectivas, pues diez sitios de taponamiento de las vías simultáneamente ocupan a miles de policías, haciendo imposible su control. A esa misma conclusión han llegado los campesinos de Boyacá, vecinos de los anteriores, los del eje cafetero, Tolima, Huila, Nariño, pueblos llaneros y Colombia entera. Soplan vientos de libertad. <iframe src="https://www.facebook.com/video/embed?video_id=10151640885712017" width="1280"
Campesinos de Pasca se suman a paro agrario en Departamento de Cundinamarca
Campesinos de Pasca se suman a paro agrario en Departamento de Cundinamarca
por Militantes de Base de la Union Patriotica
Domingo, 25 de Agosto de 2013 19:13
CAMPESINOS
Los nuevos brotes de inconformismo contra los elevados costos de los insumos y los efectos negativos de los Tratados de Libre Comercio dentro del sector primario de la economía, según advierten los dirigentes rurales, mantienen en tensión a buena parte del país.
Por lo menos 500 labriegos se concentraron en el sitio conocido como Buenas Tardes por la vía que comunica a esa población con Fusagasugá, desde donde esperan marchar hacia Bogotá. Las autoridades se encuentran en Consejo de Seguridad evaluando la situación y en procura de tomar medidas que, sin afectar el derecho a la protesta, impidan desórdenes que puedas desembocar en vandalismo según explicaron.
Los nuevos brotes de inconformismo contra los elevados costos de los insumos y los efectos negativos de los Tratados de Libre Comercio dentro del sector primario de la economía, según advierten los dirigentes rurales, mantienen en tensión a buena parte del país.
En Cundinamarca ya son Zipaquirá, Ubaté, Chocontá, Villapinzón, la Calera y ahora Pasca, mientras el Gobierno Nacional trata de conjurar la difícil situación convocando al diálogo a través de las carteras de Agricultura, Minas y del Interior.
De momento los departamentos más afectados son Boyacá, Nariño y, en menor medida, el eje cafetero y Antioquia, Santander, Norte de Santander, Tolima, Putumayo, Arauca y Casanare en donde comienza a sentirse el desabastecimiento de alimentos.
En el primero de estos departamentos las protestas han alcanzado niveles dramáticos; por lo menos unos 50 mil campesinos mantienen bloqueadas numerosas vías aislando a Tunja, Duitama, Sogamoso, Ventaquemada, Tibasosa, Nobsa, Ramiriquí, Samacá, Villa de Leyva, Chiquinquirá y Cucaita principalmente.
Prácticamente se encuentran inmovilizados los transportes de carga y pasajeros aumentando la tensión en esas zonas.
Los movimientos más sonoros son protagonizados por los papicultores con quienes se encuentra reunido el ministro de Agricultura Francisco Estupiñán, en un esfuerzo por persuadirlos de que suspendan la protesta.
Estos se mantienen en su posición advirtiendo que no levantarán la movilización hasta tanto no haya pleno acuerdo; dicen que no quieren incurrir en las escenas del pasado cuando pactaron acuerdos que el gobierno incumplió.
Igual posición asumieron los camioneros con quienes se reúne el titular de la cartera de Minas y Energía Sergio Díaz-Granados.
En Cuanto a Cundinamarca los campesinos mantienen concentraciones en Zipaquirá, Ubaté, la Calera y Pasca.
Estos últimos, en el punto conocido como Buenas Tardes, esperan el arribo de más labriegos que, según indicaron, vienen de varios municipios del Sumapaz para reunirse en Fusagasugá desde donde marcharán hacia la capital de la República.
Ante ese difícil panorama el senador Carlos Ferro Solanilla reclamó el diálogo incondicional
“Es fundamental que el Gobierno negocie no solo el levantamiento del paro, sino que este episodio sirva para diseñar y ejecutar políticas claras que brinden mejores oportunidades a los campesinos”, dijo.
Ultima modificacion el Domingo, 25 de Agosto de 2013 20:16
Colombia Resiste! Cuarto día de paro agro-minero, de transporte, salud y social
Written by Eliecer Jiménez Julio. Ginebra, Suiza
Eliecer Jiménez Julio. Ginebra, Suiza.
Unos 200 mil campesinos, transportadores y mineros movilizados, 50 mil camiones paralizados en 27 departamentos, más de 30 vías bloqueadas, un muerto, 50 heridos, 100 detenidos y con la posibilidad que los Indígenas del Cauca y los campesinos de la región del Catatumbo se sumen en las próximas horas a la protesta, es el balance que se presenta en Colombia durante el cuarto día del paro agro-minero, de transportadores y de sectores sociales como la salud.
Al menos siete sectores conectados con la agricultura participan en el paro nacional que comenzó este lunes, al cual se sumaron los transportadores de carga, profesores y trabajadores dedicados a la pequeña minería, a la protesta se unieron los cultivadores de café, cacao, algodón, papa, arroz y maíz entre otros. Además de los productores de lácteos, quienes piden apoyo oficial para superar la crisis social en este país suramericano.
La situación de ataques de la fuerza pública colombiana y sus instituciones, contra los manifestantes en estado de indefensión, es tan descarada, brutal, de conducta delictiva y violatoria de los dd hh, que las Fuerzas armadas, disparan desde los helicópteros, incendian propiedades de los campesinos como los registrados en el Norte del Departamento del Cauca, Corregimiento de El Cairo, Municipio de Cajibio. El Instituto de Bienestar Familiar ha amenazado a los campesinos padres de familia con niños, de quitarles la patria potestad porque están con sus hijos en las protestas como ocurrió el 20 de agosto cerca a Barrancabermeja, punto conocido como Expoeventos y hasta los productos agrícolas como yuca, plátano, banano, etc cultivados por los propios campesinos son robados de frente y por la fuerza por parte de la policía colombiana bajo el argumento que deben ser decomisados en la protesta.
Eberto Díaz, Presidente de la Federación Sindical Unitaria Agropecuaria.FENSUAGRO y dirigente de La Mesa de Interlocución y Acuerdo Nacional del sector agrario y popular en diálogo para los medios de comunicación Europeos, dijo:“El paro agrario, minero, de transportadores y la salud, viene sumando una importante fuerza social y se ha convertido en incontenible ya que a pesar de la fuerte militarización y represión que ha habido en todas las regiones de Colombia con el ejército y la policía a través del ESMAD, los campesinos han logrado sobrepasar esas barreras y podemos decir que hay más de doscientos mil labriegos apostados a los lados de las vías, otros con taponamientos en las carreteras, a los que se han sumado más de 50 mil camioneros que han parado voluntariamente, en este sentido, el paro contrariamente a lo que decía el gobierno que la movilización sería insignificante, sin importancia y lo desconoció desde el momento en que radicamos el pliego de exigencias, no se le vio, ni dio la voluntad de dialogar y hoy los campesinos siguen allí en este cuarto día y todo deja ver que la protesta continuará indefinidamente a pesar de la represión”
Indicó el dirigente agrario que “desde los helicópteros del ejército y la policía vienen disparando gases y balas contra los manifestantes, lo que ha dejado como resultado un motociclista asesinado en Boyacá, el cual fue impactado en el pecho por un artefacto que contenía gases lacrimógenos cuando este transitaba por la vía en una moto, hay más de cincuenta heridos algunos de gravedad y cien detenidos, con lo cual se demuestra que el estado colombiano está desconociendo el derecho constitucional a las libertades de movilización, expresión, organización etc y es el único responsable de los enfrentamientos que ha habido por la provocación de la fuerza pública y agresión de estos contra los manifestantes”.
La protesta que se origina por la negativa del gobierno nacional de establecer un escenario de diálogo con las organizaciones sociales que permitan superar la grave crisis que afronta el campo colombiano producto de la aprobación e implementación de los tratados de libre comercio TLC, la altísima e ilegal concentración de la tierra, el desconocimiento de los derechos políticos del campesinado, los atropellos de la fuerza pública y el desarrollo de una política minero energética que favorece a grandes multinacionales en contravía de nuestra naturaleza y de las comunidades rurales, lo que tiene empobrecido el campo por encima del 70% el campesinado han llevado a los sectores agrarios, de trabajadores de la salud y transportadores a desarrollar el paro nacional agrario y popular que comenzó el 19 de agosto.
A pesar del despeje realizado por la fuerza pública en algunas vías de Colombia, en regiones como Boyacá, Caldas, Risaralda, Meta, Arauca, Cauca, Caquetá, Huila, Nariño, en Ituango, Antioquia, los Santanderes, en Cundinamarca, la vía a Villavicencio entre otras, heroicamente campesinas y campesinos mantienen muchos bloqueos y es donde más fuertemente se siente el paro. Pero en general hay una tensa situación debido a los enfrentamientos que hay con el ejército y el Esmad, ya que es la única forma de hacerse escuchar los campesinos, es bloqueando las vías, confirmó Eberto Díaz dirigente de Fensuagro, el cual reveló que en distintas ciudades del país numerosos grupos de estudiantes especialmente de las universidades Nacional y Distrital en Bogotá y Santander han realizado actos de protesta en solidaridad con los campesinos y el paro agrario, al igual que otros sectores sociales colombianos.
El dirigente dijo que: “si el paro sigue y se demora es culpa del gobierno, del estado y sus instituciones que no prestan atención a los campesinos y las organizaciones que han convocado este paro indefinido y hoy jueves vamos a procurar dialogar con algunos parlamentarios a fin de buscar abrir las puertas del gobierno al diálogo nacional y de negociación ya que nosotros estamos dispuestos pero no el estado, quien persiste en que se hagan mesas departamentales para seguir cubriendo los graves problemas del campo con agua tibia y nosotros decimos que el problema es estructural y como tal hay que darle soluciones de inmediato poniendo en marcha políticas efectivas dirigidas a solucionar la crisis del campo y la propiedad de la tierra, donde más de un millón de familias campesinas no posee la propiedad de la misma, el reconocimiento de las Zonas de Reservas Campesinas que es la ley 160/94, la ampliación de los resguardos indígenas, territorios afrodesendientes, y territorios interétnicos o plurietnicos y que permita a la sociedad rural vivir articuladamente, que los derechos campesinos aprobados por la ONU el año anterior se pongan en vigencia e igualmente la inversión social en agua, educación, salud, vivienda, servicios básicos etc. .
Eberto Díaz de la Mesa de Interlocución y Acuerdo Nacional del sector agrario y popular, MIA, dijo que como la lucha social en Colombia es muy dinámica, los indígenas del Cauca han dicho que si en las próximas horas no se atiende la protesta campesina, ellos los indígenas entraran también a apoyar la protesta, hecho que es muy interesante debido a lo importante que significa el movimiento indígena en el país e igualmente se ha conocido por parte de los campesinos y sectores sociales del Catatumbo que están dispuestos a regresar a las protestas y sumarse al paro”
Respecto a la solidaridad internacional especialmente europea Eberto Díaz dijo que “se necesita en forma urgente que los gobiernos amigos exijan al gobierno colombiano sentarse a dialogar en una mesa de carácter nacional con las organizaciones que hemos convocado este paro social, y a las organizaciones hermanas dirigirse a las embajadas de Colombia con el pliego que hemos presentado a través de la MIA, exigiendo un pronto diálogo con los manifestantes, escribir a la presidencia de Colombia exigiendo el dialogo y no la represión contra los manifestantes, es hora de que internacionalmente nos apoyen desde todas partes del mundo”
El dirigente de Fensuagro, dijo que han sido tantos los atropellos y violaciones de los DDHH que han creado una comisión en tal sentido la cual está trabajando con miras a presentar las respectivas denuncias internacionales ante la ONU y las distintas oficinas de DDHH en Ginebra, Suiza, y la OMCT, a fin de mostrar como están siendo violados los DDHH por parte de la fuerza pública, la cual ataca viviendas y sitios donde hay niños, mujeres embarazadas, minusválidos sin que estos estén en las manifestaciones, de todas formas están sufriendo la represión del estado colombiano.
“Desde la MIA de nuevo hacemos un llamado al gobierno nacional para que detenga las violaciones a los derechos humanos que se vienen presentando en todo el país. Se está disparado a los manifestantes con balas de fusil, se retienen buses ilegalmente, se empadrona a comunidades enteras por parte del ejercito, le reiteramos al presidente Santos, que estamos en disposición de establecer lo más pronto posible un escenario de dialogo con nuestros voceros para abordar los seis puntos de nuestro pliego nacional buscando diversas fórmulas que permitan llegar a acuerdos y superar la grave crisis que afectan nuestro país”, reiteró Eberto Diaz.
A su turno Juan Carlos Quintero, vocero de la Asociación de Campesinos del Catatumbo (Ascamcat), amenazó con la posibilidad de que retomen su paro. El dirigente dijo que de continuar las erradicaciones de cultivos ilícitos que se vienen realizando en las zonas rurales de la región, lo labriegos se unirían al paro agrario nacional. El Catatumbo fue escenario de un violento paro de varias semanas que dejo varios campesinos asesinados por la fuerza pública, un centenar de heridos y detenidos y obligó al gobierno a sentarse a negociar.
Paro Nacional Agrario ha sido un éxito rotundo, 200 mil campesinos se han movilizado
Written by Mesa Nacional de Interlocución y Acuerdo - MIA
Published on Thursday, 22 August 2013 21:47
Luego de dos sesiones de trabajo los días veinte y veintiuno de agosto de 2013, la MIA nacional agropecuaria y popular, reuniones en las cuales se analizaron las situaciones que se han presentado en los tres días transcurridos del Paro Nacional, presenta las siguientes conclusiones.
1. Contrario a lo que plantea el presidente en los medios masivos y comerciales de comunicación el paro ha sido un éxito rotundo. Cerca de doscientos mil colombianos y colombianas se han movilizado a las carreteras y calles del país para protestar contra las políticas antipopulares del gobierno actual.
2. Que es necesario mantenerse en las acciones de movilización y paro trabajando permanentemente por su fortalecimiento, buscando que nuevas organizaciones, comunidades y sectores sociales se sumen a él.
3. Que se hace necesaria la presencia de delegados de todos los departamentos en la Mesa Nacional para la coordinación y la toma de decisiones.
4. Que es fundamental mejorar la comunicación para la coordinación interna en cada departamento y de estos con la Mesa Nacional.
5. Es urgente, hacer pronunciamientos desde cada departamento, que hagan visible y legítimos tanto el Pliego Nacional como la Mesa Nacional, MIA.
6. Buscar la intervención de la ONU y el CICR, para que intervengan ante el gobierno nacional buscando frenar la violación de los derechos humanos cometidos contra los manifestantes.
7. Realizar una reunión de todos los integrantes de la MIA el día viernes a las ocho de la mañana en Bogotá, para analizar la situación y tomar decisiones con respeto al movimiento. (no debe faltar ningún delegado de ningún departamento).
8. Continuaremos con las gestiones en busca de interlocutores del alto gobierno con el ánimo de concretar la instalación de la Mesa Nacional.
9. Reunirse con la comisión incidental de la Cámara de Representantes con el mismo fin.
10. Participar en las mesas departamentales que se propongan, aprovechando estas reuniones para solicitar garantías y respeto a la movilización, denunciar los atropellos de la fuerza pública y exigir la instalación de la mesa nacional, reiterando en las intervenciones, que nuestro pliego es nacional diferente al de los demás sectores y que debe ser abordado en una mesa nacional.
11. Publicar carta abierta dirigida al Presidente de la República, en la cual se dejen claro los motivos y objetivos del Paro, la legitimidad y legalidad de las acciones de movilización, al igual que la legitimidad de las organizaciones líderes y voceros del movimiento, ratificando en ella nuestra disposición a dialogar para resolver el conflicto.
12. Desarrollar una campaña nacional e internacional de comunicación e incidencia política con el fin de buscar apoyos y aliados que sirvan de garantes y veedores en el desarrollo del paro y en la Mesa de Interlocución y Acuerdos.
13. Mantenemos firme nuestra decisión de permanecer y acrecentar las acciones de movilización y protesta pacífica, hasta tanto se dé un dialogo con el gobierno nacional que permita llegar a acuerdos frente a los puntos planteados en el pliego.
MESA NACIONAL AGROPECUARIA Y POPULAR DE INTERLOCUCIÓN Y ACUERDOS
CIRCULAR #001
Bogotá D.C. Agosto 21 de 2013
Contra la gran minería y extranjerización de la tierra: Por la soberanía nacional y alimentaria!
Contra el abandono estatal y la pobreza: Por la inversión social en el campo y la ciudad.